martes, 31 de mayo de 2011

Cuitlacoche






El Cuitlacoche es un hongo parásito del maíz y su nombre científico es Ustílago Maydis, carbón del maíz.

Una vez que sus esporas infectan una mazorca, crece como una tumoración, deformando los granos de maíz y produciendo una especie de agallas. Su aspecto en estado natural es amoratado, con partes blanquecinas y oscuras. El que lo comió la primera vez debía de tener  mucha hambre.

Cuitlacoche o Huitlacoche se utiliza en México para nombrar un pájaro y un hongo. Es una palabra compuesta que procede  de la lengua náhuatl  y une los significados “dormir” y “excrementos”. El ave cuitlacoche  suele dormir en los estercoleros. La coincidencia en el nombre con el hongo podría deberse a cierto parecido entre el ave y  la mazorca infectada del hongo, cuando se observan en el campo a cierta distancia.

Es curioso que, en la gastronomía mexicana, se utilicen poco las setas y hongos naturales a pesar de la gran utilización de hierbas y vegetales silvestres en su cocina. Sin embargo se han fijado en un hongo que parasita y destruye muchas cosechas del cereal básico de su alimentación. Pero es tan rico que algunos se alegran cuando aparece en las mazorcas, hasta el punto que se está intentando su cultivo organizado. Es más valioso el hongo que la mazorca.

Este “caviar vegetal”, una vez cocinado es negro y tiñe todo lo que acompaña. Si nos fijamos, no hay  tantos alimentos de color negro, pero todos lo que se me ocurren me parecen exquisitos: el caviar, la trufa negra, la tinta del calamar que es básica para el arroz negro y los chipirones en su tinta, las moras de zarza, muchas morcillas, las  aceitunas negras..., y el cuitlacoche.

¿A qué sabe? Es el típico alimento de gusto adquirido o cultural, por lo que puede gustar mucho o no gustar nada. A mí me trae recuerdos a tierra húmeda y frutos secos como   avellana o nuez, pero el sabor y el olor es tan original que cualquier descripción quedaría corta y demasiado subjetiva.

Como cualquier hongo, tiene propiedades nutritivas muy interesantes. Aunque lo importante de este tipo de alimentos exóticos es su aportación a la cultura gastronómica, ya que su consumo es mínimo. Pero es interesante decir que es muy rico en lisina, uno de los aminoácidos esenciales, cuando esa es la gran carencia del maíz.

Cerca de las zonas donde se produce, se puede encontrar en mercados locales.  Pero lo normal es que lo encontremos enlatado y preparado para agregar a una farsa que nos sirva para rellenar, tacos, tortillas, pechugas o canelones. Yo lo probé rellenando unos canelones con una farsa hecha con cebolla confitada y una seta de cardo  muy bien picada para dar volumen y mezclada con una lata que me trajo un amigo de México.

Hay dos marcas que lo venden envasado y se puede encontrar en tiendas de productos mexicanos o tiendas gourmet: Goya  y  La Costeña.


martes, 17 de mayo de 2011

Crema de lentejas con foie






Las grasas animales y legumbres son pareja habitual en muchos platos.  Muy ricos pero poco adecuados, en general, para una cena.

Sin embargo, una suave crema de lentejas acompañada de unos daditos de  foie  es  válida como primer plato o entrada para cualquier cena. Y si no os quedáis muy tranquilos con dar lentejas, le podéis cambiar el nombre : foie micuit sobre lecho de crema de lentejas al curry.


Este es un plato que casi todo el mundo sabe hacer y, por supuesto, las mejores las hace mamá.  Yo pongo cebolla, zanahoria y un pimiento  picados en una olla con un aceite de oliva muy suave y los dejo a fuego lento durante unos minutos. Una vez que la cebolla esté transparente  añado un tomate picado y pelado y unos dados de patata . Sigo con el fuego medio otros 15 minutos.

En la misma olla añado las lentejas, calculando 100 grs. en seco para cada dos personas.  Completamos con un litro de caldo de pollo y dejamos hervir a fuego lento durante una hora.  Trituramos y colamos. Corregimos de sal y aromatizamos con un curry apenas picante

Esta vez, le vamos a poner foie  pero  podríamos pensar en unas láminas de trufa negra o unos boletus salteados.


Aunque este delicatessen se merece un post, os diré que ya está prohibida su producción por el método tradicional, es decir, con alimentación forzada, en 20 países. Existe un productor en Badajoz que lo está produciendo de forma natural, sin que el animal sufra.  Se llaman La Patería de Sousa y son los proveedores de foie gras de la Casa Blanca.

Lo ideal es utilizar un foie gras mi-cuit o semi-conserva.  Lo cortamos en dados pequeños y  repartimos unos cuantos en cada plato.

A pesar de su suavidad, este es un plato contundente.  Por eso es aconsejable servirlo en medias raciones. Menos es más.





domingo, 8 de mayo de 2011

Alboronía




Alboronía como alcachofa, alubia, albóndiga, y alcohol son palabras de origen árabe. Casi todas las que empiezan por ”al“ lo son.  Proviene del vocablo árabe al-baraniyya que significa “cierto manjar”.

La alboroníaboronía o guisado de berenjenas  es la madre de todos los pistos, como aseguraba Néstor Lujan. Plato andalusí procedente de la cultura mozárabe, usual en bodas y celebraciones, ha pasado a las cocinas regionales como pisto manchego,  tumbet mallorquín,  xanfaina catalana o zarangollo murciano. Incluso existe  en casi todas las cocinas americanas con el nombre de boronía y con plátano maduro como nuevo ingrediente.

La berenjena es prima hermana del tomate y de la patata. Las tres son de la familia de las solanáceas y esta es la única que no vino de América. Es originaria de la India y hasta la Edad Media no llegó  a Europa.

La de la foto:

En una olla mediana ponemos aceite de oliva, un ajo picado y una cebolla grande partida en trozos de 1 cm. Cuando la cebolla esté transparente ponemos tres tomates pelados y troceados en dados de 2 cm. Agregamos una cucharada de azúcar para anular la acidez del tomate. Cuando el tomate está hecho añadimos un calabacín, tres  berenjenas y un kilo de calabaza amarilla, troceados en dados de unos 2 cm. Salamos.

Dejamos a fuego suave, moviendo de vez en cuando con cuidado de no romper los trozos. Cuando la berenjena esté en su punto retiramos del fuego. En la receta original le pondríamos una cucharadita de pimentón dulce, pero yo le puse  comino molido al gusto extremeño.

Es un plato que admite muchas variaciones que pueden matizar su fuerte personalidad. Utilizad el fondo de nevera sin miedo, pero que nunca falten la berenjena, el calabacín y la cebolla.

Mejora tras  una noche en la nevera y  tomándolo a temperatura ambiente.

En una cena en casa es una entrada sorprendente por su sencillez.  Y si os atrevéis a hacer unos huevos escalfados y ponéis uno encima de cada plato, os aseguro que los invitados se levantarán a aplaudir.

lunes, 2 de mayo de 2011

Vodtonic





Alguien muy cercano lleva advirtiéndome durante algún tiempo de la aparición de una nueva estrella en el mundo de los cócteles, el Vodtonic.  Parece que vuelve con fuerza el vodka. Y quien me lo dice es un auténtico sabueso de las nuevas tendencias en restaurantes, coctelerías y  sitios varios relacionados con la gastronomía en Madrid. Hablemos, pues, del vodka.

Volvemos al vodka al que abandonamos en los 90 cuando cambiamos el Destornillador,  por el  ron con Coca Cola y el  gintonic.  Aunque el incombustible Bloody Mary aguantara bien el tipo como un buen recurso  para el día después.

¿Vodka o Vodca?  La RAE acepta las dos acepciones y deja libre  el género. El vodka o la vodka lo mismo que el mar o la mar. Vodca en ruso es el diminutivo de Voda que significa agua.  Agüita.

El vodka es la bebida espirituosa mas consumida en el mundo. Se beben unos 4.500 millones de litros al año y hoy es la categoría más dinámica de la industria mundial de bebidas de alta graduación. Se fabrica en todo el mundo aunque su origen está en Polonia y Rusia.

Es una  mezcla de agua y etanol sin apenas presencia de botánicos, por lo que permite cócteles en los que el protagonismo aromático se deja a los acompañantes. Fabricada a partir de cereales como el trigo y el centeno  o alimentos ricos en almidón como patatas o remolacha, ofrece un alcohol de gran neutralidad y limpieza. Es como un papel en blanco sobre el que se puede escribir cualquier cosa.  Es el alcohol perfecto para un cóctel y, además, parece que es el de menor toxicidad por su pureza.

El crecimiento en el consumo se ha acelerado exponencialmente en los últimos años y esto es atribuible a la gran influencia de las modas norteamericanas y a su menor coste de fabricación frente a cualquier bebida oscura ya que no es necesaria  maduración antes de su comercialización. 

Con el vodka está ocurriendo algo parecido a lo ocurrido con las ginebras. Estamos en una carrera por las Premium.  Así hemos pasado de ver en las tiendas tres o cuatro marcas hace unos años, a las 148 que comercializa, por ejemplo, la catalana Grau.

Grey Goose,  Citadelle 6C,  Karlsson's,  Xellent,  Imperia,  Exquisite Wyborowa, Ultimat, Kievskaya,  Puriste,  Stolichnaya Elit,  Skyy,  Cape North,  Finlandia,  Belvedere,  42 Below, Cîroc,  Akvinta,  Kauffman Luxury Vintage,  Jean Marc X.O.,  Idôl Bourgogne,  Gorbatschow Platinum... son solamente algunas de las numerosísimas marcas comercializadas hoy.

El Vodtonic  de la foto lo he preparado  con vodka Kremlyovskaya y tónica Schweppes , mucho hielo y aromatizado con cáscara de mandarina. Elegante.

De los vodkas actuales, me gustaría destacar uno en concreto por las peculiaridades que lo rodean :  Karlsson´s Gold


 
Se trata del único vodka sueco hecho totalmente con patata nueva, utilizando una mezcla de siete variedades. Hay muy pocos productores en el mundo que utilicen la patata como materia prima, casi todos proceden del centeno o del trigo.

Además se hace con una única destilación en columna, cuando los Premium del mercado presumen de tres, cuatro y hasta nueve. Con esto consigue estar más cerca de los aromas originales de la patata nueva.

Se trata de un proyecto personal de Börje Karlsson´s, creador del vodka Absolut. Una vez jubilado, ha recuperado una vieja receta de su país, abandonada en los años 70, con el objetivo de hacer el mejor vodka de patata del mundo. Un vodka de autor.

Acepta cualquier combinación en coctelería, aunque hay una muy sugerente. Tomarlo sólo con hielo y un ligero toque de pimienta negra. Suena bien.


martes, 26 de abril de 2011

Risotto de confit de pato




En realidad, un risotto  no es un plato sino una forma de cocinar el arroz en Italia, concretamente en Piamonte y Lombardía.  Allí utilizan la variedad Arborio de grano grueso con mucho contenido en almidón.  Pero  podemos utilizar cualquiera de nuestras variedades de grano grueso, como el arroz Bomba o el Bahía. Y nunca  debemos hacerlo con variedades de grano largo como el Basmati o el Jazmín.

Los ingredientes básicos de un risotto son: cebolla, aceite, mantequilla, arroz de grano grueso, copa de vino blanco, caldo de pollo y queso parmesano rallado.

Risotto 

Picar una cebolla y pocharla en una mezcla de mantequilla y aceite de oliva a fuego muy suave y removiendo continuamente. Cuando esté transparente, añadir una copa de vino blanco y dejar evaporar. Poner dos tazas de arroz de grano grueso y remover hasta que el arroz cambie de color, añadiendo inmediatamente una taza de caldo sin parar de remover. Seguimos incorporando  caldo, siempre muy caliente para no parar la cocción del arroz, y removiendo. Cuando hayan pasado unos 20-25 minutos, probad y si está al dente, añadid queso parmesano y seguid moviendo otros 5 minutos. Debe quedar cremoso.

Para el risotto de la foto, necesitamos un par de muslos de confit de pato. Una vez fuera de sus envases, retiramos la grasa que les acompaña, reservando un par de cucharadas . Los metemos 15 segundos al microondas para que sea más fácil desmenuzarlos. Desechamos la piel.

La receta es la de un risotto básico salvo que a la mantequilla y al aceite para hacer la cebolla, le sumamos algo de la grasa que reservamos.  Cuando esté casi terminando de hacerse la cebolla, picamos medio calabacín  en tacos de 1cm que nos va a aportar una especial suavidad. A media cocción del arroz, añadimos la carne desmenuzada del confit.

A partir de aquí, la imaginación al poder. Podemos hacer risottos de lo que se nos ocurra y, sí, algunos nos quedarán horribles. Pero os aseguro que el de la foto quedó delicioso y con la personalidad del confit.

Perfect!

lunes, 18 de abril de 2011

Vinos para una crisis


Dicen los economistas que, tras las crisis económicas queda un cierto poso de sensatez y austeridad en los comportamientos relacionados con el consumo. Después se va  perdiendo hasta que desaparece en el siguiente ciclo expansivo.

Hoy quiero comentar dos guías que van en la línea de aportar sentido común y sensatez a un mundo como el del vino, tan propenso a caer en los excesos y en el esnobismo. Una norteamericana y otra española.

En EEUU está arrasando  Robin Goldstein con su Guía de vinos baratos, The Wine Trials. Hasta aquí, nada nuevo bajo el sol; una guía que cataloga aquellos vinos que están por encima de una calidad y por debajo de un precio. Es la guía que buscan los norteamericanos en un momento como el actual. Buenos vinos por debajo de 15 dólares.

Robin Goldstein, que es un punto provocador, empezó a ser conocido en EEUU por algo muy osado. Consiguió que la revista Wine Spectator, del conocido gurú Robert Parker, publicara, en la categoría de cartas de vinos relevantes en el mundo, una lista de vinos de un restaurante italiano llamado La "Osteria L´Intrépido" que no existe y en el que, entre los 200 vinos recomendados por el ficticio restaurante, figuraban 15 calificados como muy mediocres por Wine Spectator en números anteriores. La revista tuvo que reconocer el error y su prestigio ha quedado seriamente afectado.

The Wine Trials  es un catálogo de los 100 mejores vinos por debajo de 15 dólares que se pueden tomar hoy en EEUU. Goldstein ha recorrido el país haciendo catas ciegas con 6000 expertos y aficionados de todo el país.  Les ofrecía vinos con precios comprendidos entre 1,5 y 150 dólares envueltos en bolsas de papel. En estas catas demostró que había vinos muy económicos que eran muy bien valorados. Con estos resultados confeccionó la guía, mostrando, al mismo tiempo, que la puntuación de algunos vinos de 10 dólares había superado otros muchos de precio muy superior.

Esta guía viene a corroborar los resultados de un estudio realizado por el California Institute of Technology que demostró que los consumidores tienden a sentir más placer cuanto más caro es un vino. El estudio consistió en monitorizar el cerebro de 21 voluntarios, no expertos, y darles a probar  distintos vinos de los que sólo se les informaba previamente del precio.  Se medían las sensaciones de la corteza orbito-frontal media que es la zona del cerebro donde se procesan los placeres producidos por los sabores. Como prueba adicional, se les daba a probar un mismo vino dos veces, diciéndoles que eran distintos y con distinto precio. Os podéis imaginar lo que pasaba.

Dado que no se les preguntaba por sus sensaciones sino que se medía objetivamente su grado de placer, el estudio demuestra que el conocimiento previo del precio de un producto nos predispone claramente al placer que vamos a sentir.

En todo caso, The Wine Trials y Robin Goldstein han revolucionado el mundo del consumo de vino en EEUU y han puesto de los nervios a los muchos que pensaban que la medida de la calidad de un vino es el precio. Por contra, el consumidor medio está encantado.





En la misma línea que la guía norteaméricana, en España aparece la de Los Supervinos.

El sociólogo y escritor catalán Lluís Tolosa, autor de varios libros sobre vinos, ha tenido la felíz idea de pensar en aquellos que compran (compramos) vino al mismo tiempo que hacemos la compra.

En España, el carné de conducir por puntos ha trasladado gran parte del consumo de los restaurantes a las casas. Y Lluís Tolosa observa que gran parte de esos vinos que se consumen en casa, se compran en los Hiper, sin ningún tipo de asesoramiento, ya que las guías de vinos normalmente no hablan de ellos.

La guía se ha puesto límites. Todos los vinos que aparecen ahí se venden en los supermercados y no hay ningún vino que supere los 6,99 euros. Para los cavas pone un límite de 11,99 euros.

Pues bien, el jurado de los  premios Gourmand World Cookbook, equivalentes a los Oscar de las guías gastronómicas, le ha concedido el premio a la Mejor Guía de Vinos de España. Este premio le ha supuesto participar en el certamen internacional en París, donde ha obtenido el Tercer Premio.

El vino tinto más barato que aparece, es un Castillo de Liria  Bobal&Shiraz del 2009 de Vicente Gandía Plá. Vino muy correcto a un precio de 1,49 €.

Sabiendo que estamos en un país privilegiado por la variedad de sus vinos y por la imbatible relación calidad-precio, busquemos las joyitas. Iniciativas como la de Lluís Tolosa nos ayudan en esta búsqueda y, sobre todo, a navegar por la superoferta (ofertones) de los Hiper.

sábado, 16 de abril de 2011

Sopa de Cebolla

 

Antonio Martín es el alma gastronómica de un grupo de amigos al que tengo el honor de pertenecer. Hiperactivo en todo lo relacionado con la comida, su cocina se basa en cuidar al máximo la calidad del producto y en una buena técnica. Pero tambien se permite salir de la ortodoxia de vez en cuando. Le gusta innovar con platos tradicionales.

La sopa de cebolla es hoy un plato tradicional de la cocina burguesa en Francia.  Sin embargo la soupe a l´oignon aparece en los libros por primera vez durante la Revolución francesa y se habla de ella como una sopa humilde. La más humilde de las sopas de verduras.

En la casita de Vinuesa, el plato protagonista del fin de semana era la sopa de cebolla. Esto ya estaba en el programa y para ello, D. Antonio Martín y su escudero D. Javier Cano habían comprado las cebollas más caras de España en El Corte Inglés. Venían envueltas como si fueran bombones.

Vamos a la sopa:

Aunque la francesa se hace con mantequilla, Antonio optó por una mezcla de un aceite de oliva virgen suave y, sí, mantequilla. Las cebollas cortadas en juliana y a fuego muy suave, son movidas con mimo de vez en cuando con una cuchara de madera, hasta que marchitan. Esto tarda una media hora.

Se mojan generosamente con caldo de pollo, dependiendo de las raciones. Para un kilo de cebollas, un litro y medio de caldo. Se deja cocer a fuego suave durante una hora.

Tostamos unas cuantas rebanadas de pan y cubrimos con ellas la sopa ya terminada. Por encima de las tostadas distribuimos dos o tres huevos batidos como para tortilla. Aunque esto no aparece en la receta tradicional, es el punto personal de Antonio. Para terminar, cubrimos con queso rallado y gratinamos al horno a 220 ºC,  durante unos 5 minutos, hasta ver fundido el queso. Servimos inmediatamente.

 
Resulta impresionante la mezcla entre suavidad y contundencia. Un espectacular primer plato.

Como no podía ser de otra forma, Antonio salió a hombros por la puerta grande.